Investigación del CIO
Medidas de EE. UU. sobre bancos mexicanos son ruido, no señal
Evaluamos las implicaciones de las sanciones de EE. UU. sobre la banca mexicana y su impacto en los mercados.
Las sanciones recientes de EE. UU. a tres instituciones financieras mexicanas no representan un riesgo a la estabilidad del sistema financiero mexicano, que sigue mostrando resiliencia. En este informe, analizamos por qué el impacto es limitado y qué señales observar como inversionista.
Análisis regulatorio y del mercado
- El 25 de junio, la Red de Control de Delitos Financieros del Departamento del Tesoro de los Estados Unidos (FinCEN) identificó a tres instituciones financieras mexicanas – CIBanco, Intercam Banco y Vector Casa de Bolsa – como principales preocupaciones en materia de lavado de dinero en relación con el tráfico ilegal de opioides.
- La designación prohíbe a las instituciones financieras estadounidenses realizar transacciones con estas entidades. Las instituciones financieras sujetas a las órdenes tienen plazo hasta el 4 de septiembre para implementarlas. Estas son las primeras medidas ejecutadas bajo la Ley de Sanciones del Fentanilo y su legislación complementaria FEND Off Fentanyl Act, lo que subraya el enfoque de Washington en interrumpir las cadenas de financiamiento de opioides sintéticos.
- Las instituciones en cuestión representan menos del 2% de los activos totales del sistema bancario comercial en México y menos del 9% de los activos bajo custodia en servicios fiduciarios. Para contextualizar, líderes como BBVA, Santander, y Banorte concentran casi el 50% de todos los activos bancarios comerciales. Por lo tanto, los riesgos de contagio parecen contenidos.
- Poco después del anuncio, el regulador bancario de México (CNBV) asumió el control de las tres instituciones temporalmente. Esta medida buscó proteger a los clientes y asegurar de que las empresas cumplieran con los estándares regulatorios, con garantías que las intervenciones no afectarían al sistema financiero del país. El Ministro de Hacienda de México comentó que las medidas "aportan certeza" a los titulares de las cuentas y luego confirmó que parte de las operaciones de CIBanco e Intercam serían transferidas a bancos de desarrollo para asegurar la continuidad del servicio.
- Cabe destacar que FinCEN extendió el plazo de implementación de las sanciones del 21 de julio al 4 de septiembre, reconociendo que las autoridades mexicanas "han tomado medidas adicionales para abordar las preocupaciones planteadas en las órdenes de FinCEN, incluyendo la gestión temporal de las instituciones afectadas para promover el cumplimiento normativo y prevenir el financiamiento ilícito”.
- Es probable que el efecto más significativo en el corto plazo será operativo. Por ejemplo, creemos que los FIBRAs mexicanos tendrán que migrar sus mandatos fiduciarios para evitar interrupciones, en particular para los inversionistas extranjeros.
- CI Banco es el segundo mayor fiduciario de FIBRA, y el sector ha experimentado transiciones similares en el pasado. Cuando Deutsche Bank salió del negocio fiduciario mexicano en 2016, el mercado se adaptó sin problemas, y ahora esperamos un resultado similar.
- Algunas entidades internacionales han tomado medidas de precaución. Visa suspendió las transacciones internacionales de tarjetas emitidas por CI Banco y S&P Global Ratings rescindió su contrato con la misma institución. Aun así, estas son decisiones aisladas y no reflejan disrupciones más amplias en el sistema financiero de México.
- El peso mexicano, la deuda soberana y los principales índices de referencia han mostrado poca o nula reacción, lo cual refleja la confianza de los inversionistas en la resiliencia del sistema financiera del país – algo que consideramos justificado.
- Consideramos que la intervención en estas instituciones financieras no es una señal de debilidad en los estándares regulatorios del sector bancario de México, ni implica riesgos sistémicos o de liquidez. Las autoridades mexicanas actuaron con rapidez y el sistema financiero sigue operando con normalidad.
- Esperamos que el peso mexicano y las acciones locales se mantengan relativamente resistentes, incluso frente a la volatilidad de corto plazo. La deuda soberana mexicana en dólares ofrece rendimientos atractivos en relación con los bonos del Tesoro de EE. UU., con un riesgo crediticio manejable, en nuestra opinión. Mantenemos una visión constructiva sobre la deuda corporativa mexicana en dólares, respaldada por fundamentos sólidos y rendimientos atractivos.