Investigación del CIO
Escasez de energía, Conferencia sobre el Océano y leyes en energías renovables
El panorama global destaca riesgos, cambios y oportunidades en la transición energética.
Puntos principales para inversionistas
1. Se registraron más de 10 cortes de energía significativos a principios de 2025, lo que resalta la necesidad urgente de fortalecer la resiliencia de las redes y modernizar la infraestructura.
2. La Conferencia sobre el Océano de la ONU se enfoca en oportunidades de inversión en la economía azul, en medio de nuevas regulaciones y cambios en los incentivos para las empresas.
3. La legislación de la Cámara de Representantes de EE. UU. ha endurecido los créditos fiscales para energías renovables más de lo previsto, aunque la fuerte demanda energética debería sostener su crecimiento.
Cortes de energía y resiliencia de la red
- Más de 10 cortes de energía significativos este año han provocado un impacto inmediato, desde atingir a la Península Ibérica por casi un día completo hasta dejar al 98% de la población chilena sin electricidad. En marzo, el incendio de una subestación eléctrica interrumpió la operación del aeropuerto más concurrido de Europa, el Heathrow en Londres, durante más de 18 horas, afectando a más de 200.000 viajeros.
- A medida que estos eventos se vuelven más frecuentes y severos, surgen interrogantes sobre el papel de las energías solar y eólica, la resiliencia de las redes eléctricas y el envejecimiento de la infraestructura, además del aumento de fenómenos climáticos extremos.
- El riesgo elevado de escasez en el suministro eléctrico ha impulsado la demanda de electrificación, especialmente por el aumento del consumo energético de centros de datos y aplicaciones de inteligencia artificial.
- Los gobiernos están recurriendo hacia fuentes de energía renovable como vía para reforzar la soberanía energética y la estabilidad del sistema, como demuestra el caso de Indonesia, un país que tradicionalmente depende del del carbón y petróleo. Según BNEF, la inversión mundial en transición energética alcanzó los USD 2 billones por primera vez en 2024, subrayando el impulso acelerado detrás de la energía limpia.
- Indonesia busca reducir su dependencia de combustibles fósiles importados, que le cuestan alrededor de USD 40 mil millones anuales. El país está adoptando una estrategia energética integral, con un aumento en la producción nacional y la financiación de proyectos de energía limpia a través del nuevo fondo soberano Danantara.
- El auge de los centros de datos y de la IA está impulsando una demanda energética sin precedentes, especialmente en procesos de cómputo, refrigeración y operaciones de instalaciones. Según la Agencia Internacional de la Energía (IEA), el consumo mundial de electricidad por parte de los centros de datos podría duplicarse para 2030, alcanzando 945 TWh y superando el consumo anual de Japón. Esperamos que los centros optimizados para IA liderarán esta demanda, con un consumo de energía proyectado a cuadruplicarse para 2030.
- Esta tendencia podría intensificar el desequilibrio entre oferta y demanda eléctrica. En EE. UU., se advierte sobre el mayor riesgo de cortes durante el verano. Dado que casi la mitad de todos los centros de datos están en EE. UU., se espera que representen cerca del 50% del aumento en demanda eléctrica del país hacia 2030. Para entonces, EE. UU. consumiría más electricidad en el procesamiento de datos que en toda la manufactura intensiva en energía.
- En otras regiones, como Asia-Pacífico, se proyecta una expansión acelerada de centros de datos, con una tasa de crecimiento anual compuesta del 13% entre 2025 y 2030. Satisfacer esta demanda energética es un desafío global, donde cada país adoptará estrategias diferentes en cuanto a la combinación de combustibles y capacidad de red, dependiendo de la disponibilidad de recursos, la dinámica de las políticas y los factores económicos.
- Un denominador común es la necesidad de modernizar la infraestructura energética para mejorar la resiliencia y la independencia de los sistemas. La reducción deliberada de generación eléctrica por falta de capacidad de red es caza vez más común. Esto puede resultar en precios bajos o incluso negativos, afectando la rentabilidad de proyectos.
- Creemos que las soluciones están en la modernización de la red, el almacenamiento energético y la reforma del mecanismo de mercado para incentivar la flexibilidad del sistema. La electrificación continúa mostrando fundamentos sólidos y visibilidad de demanda a largo plazo.
Conferencia de la ONU sobre Océanos
- La Conferencia de las Naciones Unidas sobre los Océanos se celebró en Niza, Francia, en un contexto muy diferente al de la última edición en 2022, en Kenia, que fue clave para la firma del Tratado de Alta Mar de la ONU en 2023.
- Este año, la conferencia establece tres prioridades principales: completar los procesos multilaterales vinculados a los océanos, movilizar recursos financieros hacia la economía azul y fortalecer la formulación de políticas basada en evidencia científica.
- Antes del evento, la ONU lanzó el Protocolo de Inversión en los Océanos, un nuevo marco destinado a fomentar inversiones sostenibles en la economía azul, incluyendo recomendaciones sectoriales sobre cómo participar.
- Desde la firma del Tratado de Alta Mar, hemos visto avances notables. La acción oceánica se ha convertido en un punto focal para la inversión de impacto y la filantropía, destacándose en foros como la Semana del Clima de Nueva York y el Foro Económico Mundial en Davos.
- Según un informe financiado por la Unión Europea, las inversiones divulgadas en la economía azul se triplicaron en la última década, superando los EUR 13 mil millones entre 2018 y 2023. Entre los ejemplos emergentes destaca el primer bono de impacto oceánico del mundo, lanzado en Indonesia este año.
- Sin embargo, la mayoría de los proyectos e innovaciones que ofrecen un impacto positivo medible sobre los océanos siguen siendo de pequeña escala. Por ello, se hace necesario ampliar el enfoque más allá de lo tecnológico e incluir toda la cadena de valor de la economía azul, como la transición hacia el uso sostenible de los recursos marinos en sectores clave como transporte marítimo, turismo, pesca e infraestructura portuaria.
- Una visión sistémica sigue siendo fundamental para lograr una economía azul más sostenible. El fortalecimiento de regulaciones será clave, con la meta de proteger el 30% del océano para 2030 (actualmente, sólo el 8%). Esta estrategia busca elevar el costo del daño ambiental. En mayo, por ejemplo, 3M llegó a un acuerdo para pagar USD 450 millones por la contaminación con "químicos eternos" en el agua potable de Nueva Jersey, sumando más de USD 10 mil millones en sanciones desde 2018.
- En abril, la Organización Marítima Internacional (OMI) aprobó regulaciones de cero emisiones netas para el transporte marítimo mundial, que incluyen estándares obligatorios de combustible y precios por emisiones, con amplias repercusiones sobre los costos operativos y de flota.
- Aunque las sanciones son claras y estrictas, los incentivos siguen siendo limitados e inconsistentes, dependiendo del sector o empresa. Los cambios políticos y percepciones públicas pueden reducir el ímpetu corporativo para abandonar prácticas tradicionales.
- En mayo, PepsiCo retiró su meta de reutilización de plásticos, siguiendo a Coca-Cola, que en febrero optó por volver al plástico ante nuevos aranceles estadounidenses sobre el aluminio. Esto resalta que la transición sostenible requiere no solo señales regulatorias, sino también una alineación de incentivos económicos para asegurar la competitividad de materiales de menor impacto ambiental.
Impacto del proyecto de ley en EE. UU.
- Después de centrarse en acciones ejecutivas, la administración Trump está avanzando hacia la legislación. El proyecto conocido como “One Big Beautiful Bill” (OBBB) fue aprobado por la Cámara de Representantes el 22 de mayo y se encuentra en revisión por el Senado.
- Aunque el mercado esperaba cambios al IRA, el texto aprobado por la Cámara adoptó un enfoque más restrictivo sobre los créditos fiscales para energías renovables, resultando más negativo de lo anticipado para los desarrolladores locales.
- El proyecto intensifica la fiscalización sobre la procedencia extranjera de insumos para quienes buscan créditos fiscales. Las modificaciones a la disposición de la Entidad Extranjera de Interés (FEOC, por sus siglas en inglés) niegan el acceso a créditos a proyectos que incluyan asistencia material de estas entidades o de países prohibidos como China, Rusia, Irán o Corea del Norte.
- Esto aplica incluso si los materiales fueron incorporados indirectamente, lo cual representa un reto adicional para desarrolladores, especialmente en sectores como la energía solar donde algunos minerales críticos solo se obtienen de China. Además, se adelanta el plazo para cumplir con estos requisitos: si bien versiones anteriores otorgaban un año desde la promulgación, ahora entrarían en vigor a finales de 2025.
- Muchas empresas están tratando de reducir el impacto de estas restricciones mediante el almacenamiento de recursos. Esta estrategia suele estar disponible solo para compañías grandes con balances sólidos y liquidez suficiente, excluyendo a desarrolladores más pequeños.
- El proyecto también acelera la eliminación gradual de créditos para energías limpias y crea plazos más estrictos para la elegibilidad. Los proyectos que deseen acceder a créditos 45Y o 48E deben comenzar construcción dentro de los 60 días posteriores a la promulgación y estar operativos antes del 31 de diciembre para 2028. Esto podría resultar poco factible para algunas compañías, favoreciendo nuevamente a actores más grandes con inventario, derechos de interconexión y proyectos ya en cartera.
- Se anticipa que el Senado modifique algunas de las disposiciones más exigentes, particularmente en relación con los plazos de desarrollo de energía renovable y las fechas de vigencia de la FEOC.
- Aunque se espera que continúe la presión política sobre las energías renovables, la creciente demanda energética podría ser un motor más relevante que los créditos fiscales.